Buenas tardes a todos los lectores, una vez me retraso de mis quehaceres blogueros, sin ninguna pena ni culpa. Siempre he pensado que cuando se convierte en una obligación se llama trabajo y esto de momento, es diversión. De momento.
Esta semana hablaremos de un grupo español, murciano para ser exactos. Pero que se mueve en unos sonidos bastante alejados a lo que por geografía podría atribuírseles. Ese disfraz de post-rock que visten no les queda nada mal, aunque lleven incrustada en sus pieles una genética pop-rock bastante marcada.
Todo comienza cuando Paco Román encuentra a Fernando Lillo. Ya sabéis, vocalista/guitarrista conoce a pianista y son felices hasta el final de los días. O algo así. Más tarde ya se incorporaron el bajo y la batería para conformar un cuarteto redondo pero al que se le nota desde casi los primeros acordes que la esencia va en el binomio piano-guitarra. Todo esto se advierte ya en el primer retoño que tienen ambos con la creación de Plastic Heaven(2010). Casi 2 horazas con canciones de más de 4 minutos. Dicen que la cantidad no lleva a la calidad, con excepciones. Y esta es una, porque cada una de ellas muestra un gran valor y contenido. En una primera escucha podemos entrever el pop oscuro junto con la inercia post-rockera que nos lleva a fijarnos en una textura, un punteo o un fraseo que aparece casi sin ser llamado y que hace ganar a las piezas en complejidad y profundidad. Los que me leéis ya sabéis lo que adoro ese tipo de inclusiones. Además, si hablábamos de ese color oscuro del post rock, démosle un tono azul, que cambia en el cielo, implacable, todas las tardes al anochecer.
Sil fono, la canción que abre el primer disco, comienza con un piano incansable que se repite hasta el final mientras la guitarra se va abriendo y desgarrando hasta que consigue llenar todos los espacios vacíos de la habitación. Me chifla la percusión de esta canción, que la hace tan especial, con campanillas de un xilófono y ese bombo oscuro y perdido. Y como venimos diciendo, entran en progresión hasta explotar en la épica que caracteriza el sonido Neuman. Y no, no tenían suficiente con eso que al final, y de la mano del piano, llega la ligereza y reina ese sonido ambiental que nos da libertad. El desenlace de una gran epopeya.
___
Enlace a «Sil fono»: https://www.youtube.com/watch?v=O6Rb2RFWLQI
___
Loopside, Never o la larga Brighton nos aportan la dosis de perdición perfecta, con increíbles desarrollos en las segundas partes de cada uno y que aun envueltos en ese aire de lamento y casi languideciendo en las mismas notas de cada una de las composiciones, hay algo que sin embargo se niega a claudicar. Y es que en eso se basa el post-rock más shoegazer, en la lucha frente a la propia rendición. Para los que se sorprenden de las palabruchas, entre las que me incluyo: el estilo shoegazer fue bautizado así por el patrón que seguían los integrantes de las bandas al tocar mirando al suelo, sin contacto visual con el publico (shoe-gaze). Pero lo que realmente identificó su esplendor musical y sus canciones fueron esas guitarras con retroalimentación, ruidosas y a la vez melódicas, plagadas de pedales de efectos, además de los ambientes espaciales que creaban y sus letras entre sombrías y melancólicas.
Pero no todo es oscuridad, como ya habíamos adelantado, porque entre las antes citadas podemos encontrar piezas como La yo o Asey que nos hacen viajar a otro Neuman, ese rock alternativo más The Twilight Sad, plagado de guitarras puramente eléctricas y una batería con gran importancia.
Sin embargo, algo pasa a partir de la mitad del disco, pues parece como si el pesimismo ya no pudiera reprimirse ni una nota más. Como demuestra la canción que da nombre al disco, Plastic Heaven. Mira que no soy la persona más Mr. Wonderful que te puedas encontrar, pero esto es un nivel superior, queriditos. El intento de no plegarse de desesperación que mostraban en la primera mitad del disco, se desvanece por completo.
___
«Living in a stuck world just like you
living a fallen world
living a scaring life again
living a fallen world»
__
Enlace a «Plastic Heaven»: https://www.youtube.com/watch?v=KJJZHruvces
__
Mi pequeño Nuiman es la única canción en castellano del disco y aunque tiene ritmo, el optimismo ya está volando muy lejos de la escena. ¿Y qué o quién es Neuman o Nuiman? Pues es el nombre del perro de Paco Román. Su mascota de 15 años se llamaba Neuman, y la historia no acaba aquí, ya que le han dedicado hasta dos canciones a ese lindo can, veremos que este tipo de homenajes a seres queridos o importantes para la banda son habituales.
Never es la última gran joya del Cd, sobretodo porque en la variación meten un punteo glorioso (con el piano sobrevolando, feliz en su rica miseria) que es la cumbre del álbum.
__
Enlace a «Never»: https://www.youtube.com/watch?v=zA82FcSVjXE
___
Y después de esta creación cumbre…¿qué? Criticados por longitud y extensión la banda hace oídos sordos y sigue su camino recuperando la manera de hacer discos de hace treinta años, evitando el uso de ciertos avances tecnológicos y grabando todo prácticamente en directo, a lo que se llamó The Family Plot(2012). Ya sabéis que soy muy cansina con los ¿y por qué?, pues una vez más…¿Y por qué The family Plot? Pues este es el título de la última película de Alfred Hitchcock. Él mismo afirmó que se iría con la conciencia muy tranquila si ésta fuese su última película. Es, por esta razón, por lo que Paco Román piensa que tiene un matiz especial y por lo que decidió plasmarlo en el título de su segundo álbum, siendo éste uno de los directores favoritos del vocalista.
Me hace gracia ver blogs de expertos de música opinando sobre diferentes artistas. Si hacen algo nuevo se echan las manos a la cabeza, pero es que si continúan con su estilo original también. Basta ya. Basta ya, porque aquí los perjudicados son los músicos de verdad y los beneficiados como siempre, la megaindustria. Y todo esto viene que el disco es una continuación del anterior en cuanto a que lo que podemos encontrar son doce temas en caída libre. Música y letra de la mano de forma sublime, para homenajear a la tristeza. En esa línea de melodías profundas, densas, lentas (muy lentas) y muy tristes encontramos Lovers, la composición que abre el disco. Pero por supuesto diferenciamos nuevos tintes absolutamente geniales. El escarceo de fusión con el folk irlandés de Ben Gun, personalmente, me tiene loquita. Un banjo y un piano combinados me suenan de maravilla. Y si les añades un violín de estructura medieval, una guitarra acústica y una batería austera, el resultado es el temazo que nos ofrece Neuman.
__
Enlace a «Ben Gun»: https://www.youtube.com/watch?v=UPqM83f9oxE
___
Como hicieron en su anterior álbum, solo un tema en castellano, titulado Wandoworld. Quizás el más melancólico, nostálgico y un reflejo de todo aquello que puede provocar el desamor. El tema más luminoso del disco, suena a nostalgia: My Dad, pero para nada a optimismo. Quizás por momentos puede recordarnos a algún tema de Keane. Es brillante, porque emite la nostalgia, te inunda con ella y lo echas de menos, y te trasmite la rabia de esa sensación, en el tramo final de la canción cuando acelera su ritmo. Quieres gritar, correr, llorar…
___
could never dare to happen,
So hi! … Feel so bright . Feel so glad,
that it already happened
So have…»
A mí me engancharon con el bye fear y la unión a Stringfellow. Aunue nunca he tenido la suerte de verlos en direvto, estoy deseando que pasen los meses y estrenen trabajo nuevo y así tener alguna oportunidad!
Me gustaMe gusta
Es increíble que tengamos grupos con tanto talento en nuestro país y que siempre tengamos que buscar lejos, cuanto más mejor. Aunque con el auge de los conciertos en directo y los festivales seguro que pronto podremos disfrutarlos más a menudo.
Me gustaLe gusta a 1 persona